Más de 130 muertos en Gaza tras nueva ofensiva israelí

La madrugada del domingo 18 de mayo fue una de las más sangrientas desde que inició la guerra en Gaza. Israel lanzó una ofensiva terrestre simultánea en el norte y el sur del enclave, bajo la operación denominada “Carros de Gedeón”, que dejó al menos 130 personas muertas, según fuentes locales y medios internacionales.

Entre las víctimas hay mujeres, niños y personas desplazadas que habían buscado refugio en campamentos improvisados. Uno de los ataques más mortales ocurrió en el área de Al Mawasi, una zona que Israel había definido como "segura", donde al menos 34 personas murieron al ser bombardeado un asentamiento de desplazados.

El Ministerio de Salud de Gaza, gobernado por Hamás, informó que la mayoría de los hospitales del norte ya no están operativos. El Hospital Indonesio, uno de los últimos centros médicos en pie, fue alcanzado por proyectiles israelíes, lo que ha dejado al norte de Gaza sin infraestructura hospitalaria funcional.

Israel justificó los ataques como parte de su lucha contra Hamás, tras los atentados ocurridos en octubre de 2024. El portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, afirmó que las operaciones se centran en "eliminar células activas de terroristas" en Beit Lahia y Rafah. Sin embargo, organizaciones como Médicos Sin Fronteras y la ONU han advertido sobre las consecuencias devastadoras para la población civil.

El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su "profunda preocupación" por la escalada de violencia y reiteró el llamado urgente a un alto al fuego humanitario inmediato. También pidió a todas las partes respetar el derecho internacional y garantizar el acceso a ayuda humanitaria.

La comunidad internacional sigue dividida. Mientras países europeos piden una pausa humanitaria, otros como Estados Unidos continúan respaldando el derecho de Israel a defenderse, aunque han instado a proteger a los civiles.